El Defensor de la Tercera Edad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Presidente de la Sociedad Iberoamericana de Gerontología y Geriatría, Eugenio Semino, expone en una entrevista su preocupación por la situación económica y de salud de los jubilados en Argentina, señalando la falta de comprensión de la seguridad social para los adultos mayores.
En una reveladora conversación con María Martínez en el programa Café Sin Filtro de AMEP TV, Eugenio Semino, Defensor de la Tercera Edad de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y Presidente de la Sociedad Iberoamericana de Gerontología y Geriatría, abordó de manera contundente la problemática que afecta a los adultos mayores en el sistema actual.
Sobre la situación económica que atraviesan los jubilados en Argentina, Semino fue enfático al describir la realidad. Señaló que la situación es crítica y que ha ido empeorando con el tiempo. “Es en términos históricos, desde lo económico, desde el sistema de salud, un plano inclinado que ahora, vía la inflación y la situación social, se ha convertido en caída libre”, declaró.
Semino explicó que esta crisis se debe a múltiples factores y a una falta de comprensión por parte de los decisores políticos y sociales. “Tienen una visión obsoleta de nosotros, los adultos mayores”, afirmó. Argumentó que hoy en día, una persona que llega a la edad de jubilación (60 o 65 años) tiene la biología a su favor y puede disfrutar de 20 a 25 años de vida con calidad. Sin embargo, en Argentina, esta realidad no se refleja en las políticas públicas, y los jubilados son considerados como un gasto social en lugar de reconocer su potencial como consumidores activos.
El especialista resaltó la importancia de dos elementos cruciales en la vejez: la salud y la economía. Afirmó que se deben proporcionar tanto salud en el cuerpo como recursos económicos a los adultos mayores. En su opinión, estos son los pilares esenciales para asegurar una vejez digna. “Si se ve a los jubilados como un gasto social, lo que no es satisfacción, lo que no es cumplimiento del deseo, se convierte en enfermedad”, advirtió.
Semino también cuestionó la percepción de los políticos argentinos sobre los jubilados y señaló que a menudo se habla de lo que se les da a los jubilados en términos de medicamentos gratuitos o con descuento, pero no se considera que muchos de ellos no están enfermos, sino que han acumulado juventudes y experiencia. Esta perspectiva limitada, según Semino, lleva a políticas inadecuadas que no aprovechan el potencial de este grupo demográfico.
“Cuando uno llega a grande el deseo se mantiene durante toda nuestra vida y sin embargo parece que se lo negamos, que a cierta edad tenés que vivir con lo que te dan, no con lo que te corresponde”, agregó.
En cuanto a la oferta de atención médica para los jubilados a través del Programa de Asistencia Médica Integral (PAMI) y las obras sociales privadas, Semino señaló que los tiempos de espera para recibir diagnóstico y tratamiento son largos, que pueden llegar a tardar entre diez meses y un año, lo que resulta costoso tanto para los pacientes como para el sistema en general. Abogó por la necesidad de tratar las intervenciones médicas en personas de edad avanzada como urgencias, con el objetivo de garantizar una atención más rápida y efectiva.
En cuanto a los candidatos presidenciales, Semino manifestó que ninguno parece tener en cuenta las necesidades de los adultos mayores en sus propuestas políticas y habló de los tres más votados. Sobre el candidato de la Libertad Avanza dijo: “Milei ha demostrado ser gerontofóbico, se ha manifestado muy duramente respecto a las personas mayores, imaginate que si tiene esa concepción ¿por qué va a generar políticas adecuadas para los adultos mayores?, hay una condición supremacista en su pensamiento”.
En cuanto a la candidata del espacio de Juntos por el Cambio dijo “Patricia Bullrich en realidad no dice nada de esto que estamos hablando. Está relacionada en su momento con el 2001 con el descuento del 13% a los jubilados que ganaban más de 500 pesos, cosa que para nosotros quedó prescrita porque le ganamos el juicio y hubo que devolverle la plata a esos jubilados”.
En este contexto, Semino hizo referencia a Unión por la Patria, sobre la gestión del ministro de economía y candidato a presidente Sergio Massa donde señaló que enfrenta desafíos considerables debido a la alta inflación y la pérdida de poder adquisitivo de los jubilados: “obviamente uno siempre carga sobre el candidato oficialista porque es el responsable de la política actual que tiene sobre los hombros un año de inflación muy alta y de pérdida de poder adquisitivo de casi 30 puntos en la jubilaciones y pensiones”.
En un emotivo recuerdo, Semino reveló que en la década de 1980 donde tuvo a su cargo Hogares Públicos conoció a Jorge Bergoglio, quien luego se convertiría en el Papa Francisco. Contó que le pidió al ahora pontífice que hiciera el lavado de pies de los abuelos en el Hogar Rawson de Constitución, lo que marcó el inicio de una amistad que perdura hasta hoy. Sobre Su Santidad, dijo “el Papa es un ser humano como nosotros con una amplitud y una mente que después cada uno lo evaluará desde su condición política, pero está pensando en cosas mucho más amplias en términos de políticas a nivel universal que en las minucias a veces de estas cosas que tenemos los argentinos que en ese sentido tenemos una visión muy provinciana”.
Al ser consultado sobre si tenía esperanzas de que las cosas cambiaran, Eugenio Semino respondió con optimismo: “Absolutamente. Nosotros los gerontólogos decimos para darnos ánimo que siempre hay una vida por delante, no importa en qué momento, en qué circunstancia, y creemos en la vida, creemos profundamente en esa vida y eso es lo que nos hace pelear todos los días y lo que nos hace creer que, aunque no lo veamos, esto va a cambiar”. Sus palabras reflejan su compromiso inquebrantable con la causa de los adultos mayores y su confianza en un futuro mejor para esta población en Argentina.